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1. Con puertas de cristal
Esta cocina ha ganado metros y luz al sustituir el tabique que la separaba del salón por una gran puerta corredera acristalada con cuarterones blancos. Así disfruta de conexión visual y un paso más cómodo hacia el comedor, pero se puede aislar cuando es necesario para evitar ruidos u olores.
MUY LUMINOSA. Muebles modelo Voxtorp de Ikea y encimera gris de Silestone. Lámparas de Faro Barcelona.
Para la cocina se han elegido muebles blancos sin tiradores y una elegante encimera gris, y se han panelado los electrodomésticos para que su vista resultara más estética desde el salón. Además, tiene el mismo suelo de parqué que el resto de la casa para así ganar continuidad decorativa. Es un proyecto del equipo de I Loft You. Estas ideas te ayudarán a aprovechar tus armarios de cocina.
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2. Madera y toque de color
Abrieron la cocina al resto de este apartamento para "poder cocinar con vistas al mar". De ahí el homenaje de las baldosas marroquíes del antepecho en color azul. Al hacerlo la interiorista Mireia Torruella, de Fina Brunet Interiorisme, se encontró con un handicap: la columna. Como no podía quitarla la integró en la isla y la potenció con espejos que, además, reflejan el mar.
MUY ACOGEDORA. Muebles diseño de la interiorista, realizados por Sistema Midi de MB. Taburetes de Let's Pause.
La isla rodea la columna y tiene mucha personalidad, con una encimera de roble que se prolonga a modo de barra de desayunos y una original lámpara que pone en toque vintage.
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3. Moderna y muy personal
Esta cocina abierta sigue la misma línea decorativa que el resto de piso, donde el color gris antracita y la madera son protagonistas. Tiene muebles en laca mate gris combinados con armarios bajos de madera y una pared de palillería de roble.
SOFISTICADA. Muebles y mesa obra de Ebanistería Landa. Lámparas de Mambo Unlimited Ideas, en TAO.
La campana encastrada en el techo pasa totalmente desapercibida. La mesa de roble de comedor se apoya en la isla de la cocina y queda enmarcada por dos originales lámparas. Es un proyecto de In56 Interiorismo.
En realidad es una súper península que se apoya en la pared y tiene espacio para la zona de cocción, la de aguas y una barra de desayunos ganada al prolongar la encimera. Esta cocina se integra genial con la decoración, ya que los armarios blancos y los frentes de los electrodomésticos panelados se funden con las paredes y apenas se ven. No te pierdas otras cocinas americanas.
BLANCO Y MADERA. Muebles de Industrias Muntané. Campana de Pando y taburetes de Miki Beumala.
"Para que no se viera todo tan blanco apostamos por un suelo de madera rústico. Y esa misma madera la llevamos a la encimera y las baldas de la cocina", explica la interiorista Bárbara Sindreu, autora del proyecto.
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5. Un mueble separador
En cocinas abiertas al salón es una buena idea tener un mueble o elemento que haga de transición entre ambos espacios. Aquí es la península de DM y madera que sirve como superficie de trabajo adicional, para guardar y de barra de desayunos. Queda abierta, ya que no tiene armarios bajos, resulta muy ligera y no empequeñece la cocina.
MUY CONTRASTADA. Muebles originales de la casa. Barra de madera y DM diseño de Sube Interiorismo.
La interiorista Begoña Susaeta decidió revestir las paredes de la cocina blanca con el mismo papel pintado azul del resto del piso. Así queda enmarcada y destaca más.
Esta cocina no es muy grande, pero la altura de su techo le da amplitud. Además, han ganado una ventana y tirado un tabique para crear una barra de desayunos que incluye zona de almacenaje.
CON ENCANTO. Muebles diseño de las decoradoras. Suelo recuperado de Artisans Natural. Lámparas de Zuiver.
Para potenciar la luz, las decoradoras Loreto Balbuena y Cristina Afán de Ribera han elegido muebles con cuarterones blancos, a juego con encimera y paredes. El suelo es de mosaico antiguo.
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7. Estrecha y aprovechada
De oscura y pequeña esta cocina ha pasado a ser luminosa y más amplia. La interiorista Marta Tobella, de Sacum, ha sido la artífice de este cambio. ¿Sus secretos para conseguirlo? Han sido dos: sustituir el tabique por una puerta corredera de cristal e incorporar la zona del lavadero.
ABIERTA A LA LUZ. Puerta corredera diseñada y realizada por Sacum. El suelo de madera es de Quick-Step.
Con estos cambios la cocina disfruta la luz todo el día. Los muebles se han lacado con el color Lime Stone de Jotun para potenciar todavía más la claridad. Y para que el ambiente no quedara monocromo, la decoradora ha optado por introducir la madera en el suelo y la barra.
TONOS NEUTROS. Muebles diseñados y realizados por Sacum. Taburetes de Pilma. Alfombra y tablas, en Sacum.
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8. Una barra muy ligera
La interiorista Belén Campos quería una cocina abierta, pero que la zona de cocción y el fregadero no se vieran desde el salón. Lo consiguió dejando parte del tabique para ocultar de las miradas de estas dos áreas. La barra es abierta y está hecha con el mismo Silestone blanco de la encimera. Queda genial con los taburetes de rafia y hierro.
LA BARRA. Es de Silestone como la encimera. Electrodomésticos de Neff y taburetes de Pilma.
Los muebles de cocina son de material posformado en gris antracita y madera de roble. Una combinación muy actual que tiene el toque de calidez de la madera, también presente en el suelo de toda la planta.
LOOK MODERNO. Cocina de BCA Interiors realizada por Leicht, en Azul Acocsa. Grifería de Blanco.
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9. Una cocina abierta con un toque natural
Una cocina moderna, pero también atemporal. Esta cocina abierta al salón presume de una elegante isla que se extiende hasta convertirse en una cómoda barra de desayunos. Los armarios blancos y sin tiradores ofrecen una visión despejada, que encuentra la calidez en la encimera de madera y la lámpara de fibras.
Mobiliario de Toni Cabello.
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Zona de fuegos y office
En este proyecto del arquitecto Luis Martín Fabregat, la zona de trabajo de la cocina se ha planificado como centro de reuniones. Así, se alarga convirtiéndose en una barra de desayunos en la que predomina la madera, lo que ayuda a separar visualmente ambos espacios y, al mismo tiempo, dar calidez.
Taburetes, de La Maison. Lámpara de techo, de Natura Casa.
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10. Una cocina abierta al comedor
Esta cocina abierta al salón y al comedor pasa completamente desapercibida. Para restarle protagonismo, se pegó contra la pared. La isla –que además tiene ruedas– sirve para delimitar y separar la zona con el comedor, efecto que se ve potenciado con los listones de madera y plantas que camuflan la campana desde el salón. Una opción genial si quieres reformar la cocina.
Mesa, de Vical. Sillas, de Taller de las Indias. Taburetes, de Pilma.
La isla se ha completado con una barra de madera, con el mismo acabado que la vitrina y la mesa de comedor. Aquí verás como más detalle cómo los listones de madera con plantas sirven de barrera visual y camuflan la campana. Y todas las ideas de este piso de Madrid son igual de buenas.
Cocina, de BLR Interiorismo, sillas de la barra de Pilma y barra móvil, diseño del Estudio Hoc Volo.
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11. Una cocina abierta con todo detalle
En esta casa, reformada por la interiorista Pia Capdevila, la isla se ha planificado como el corazón de la zona de día. Y es que está abierta hacia el comedor y el salón. Los muebles en blanco combinados con madera consiguen un extra de calidez, al mismo tiempo que funciona como punto de conexión con el banco corrido que une cocina y comedor.
Los taburetes de madera y respaldo de lino de Sacum. Lámparas de Zaferano.
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Una cocina abierta (y perfecta) para una casa de revista
Y, para aumentar un poquito más esa sensación cálida, el mobiliario del fondo de la cocina, donde está colocada la columna de electrodomésticos, es de color beige.
Mobiliario de Leicht montado por Chef d’Oeuvre. Encimera de Silestone y electrodomésticos de Neff.
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12. Una cocina abierta al salón en la que el blanco manda
Y es que el color es la herramienta empleada para dar unidad a esta cocina abierta al salón, pero también el recurso de llenarla de luminosidad. Su diseño moderno y minimalista, con los electrodomésticos panelados y sin tiradores, le confiere un look atemporal. Los detalles en colores pastel suavizan y aportan un toque femenino.
Cocina diseñada por kökdeco y fabricada por Ébano. Taburetes de Ondarreta. Tablas de madera de Kado. Bandeja, de Muji.
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Almacenaje abierto (pero a un lateral)
Si te fijas en la imagen anterior, verás que desde el salón, la cocina se percibe como limpia y sin ruido visual. En cambio, al acceder a la estancia vemos que los estantes quedan abiertos, creando un divertido juego de colores que combina con el blanco. Te invitamos a que veas esta cocina abierta al salón al detalle.
Librería Quetzal, de Ébano, diseño de Kökdeco.
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13. Una cocina unida al comedor y abierta al jardín
Si hay algo de lo que presume esta cocina es de la cantidad de luz que recibe. Y es que este bajo ha recuperado su luminosidad. Aun así, se ha utilizado la isla como separación entre el comedor y la cocina, pero también se ha diseñado el resto del espacio en torno a ella.
Mesa a medida por V. Gálvez. Sillas, réplicas de la CH24 y lámparas de Kenay Home. Estores de Yute's.
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Papel pintado en una cocina abierta
Para conseguir armonizar la presencia de la cocina junto al comedor, Pía Capdevila, responsable de este proyecto, eligió papel pintado para el revestimiento. El antepecho se ha protegido con el mismo material de la encimera.
Mobiliario de Leicht para Meine Kutchen. Papel pintado modelo Stripes de Decoas. Taburetes de Superstudio.
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14. Una discreta cocina abierta y con mucho estilo
Esta cocina se concibió como espacio para compartir, por eso la mesa de comedor se ha concebido con tanta presencia que casi casi eclipsa el mobiliario de la cocina. Sin armarios altos, se han elegido unos sencillos muebles blancos y la encimera con acabado gris, en consonancia con la lámpara que corona la mesa.
Sillas, de Coton et Bois. Alfombra de yute y lámpara de IKEA.
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El toque personal de lo artesanal
Para conseguir un resultado más personal, el antepecho de la cocina se revistió con unas baldosas artesanales, que además aportan también un punto de color.
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15. Abrir un vano en la pared
También es una opción para integrar la cocina en el salón. Hay comunicación visual y el hueco abierto en la pared permite crear una zona pasaplatos muy práctica, incluso, instalar una encimera a modo de barra con taburetes.
Mobiliario de Thinking Home y taburetes en La Maison.
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Paredes para apoyar los muebles
Al abrir un vano en la pared para comunicar la cocina con el salón-comedor, la ventaja es que dispones de otra pared para distribuir los muebles. Mobiliario de Thinking Home y alfombra en La Maison.
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16. Una cocina semiabierta con una pared de cristal
Y corredera. Y, aunque puede cerrarse para evitar los malos olores en la cocina, el cerramiento elegido es una sencilla pared de cristal. Una solución que ofrece las ventajas de ambos sistemas sin renunciar al estilo.
Mobiliario diseñado por los arquitectos y realizado por su carpintero. Encimerade Silestone y electrodomésticos de Whirlpool.
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Una cocina con toques de color
Y, aunque el mobiliario es cien por cien blanco, se han utilizado los adornos como las lámparas de techo y los objetos sobre la isla para llevar un punto de color y, al mismo tiempo, un toque más personal en una cocina atemporal.
Taburetes de Vintahome. Jarras y bandeja de Batavia. Individuales, trapos y vasos, de Zara Home. Bol, jarrón y tablas, de Mestizo. Contenedor de Deco & Living, bandeja de Fronda y vajilla de Pinson Living
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17. Una cocina abierta, blanca y discreta
En esta cocina, proyecto de la decoradora Asun Antó, se eligió un discreto mobiliario, en blanco y sin tiradores. Se prescindió incluso de los armarios altos en favor de estantes, en los que colocaron varias plantas para caldear el ambiente.
El mobiliario de la cocina es un diseño de Coton et Bois. Taburetes, en el estudio de la decoradora.
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La fuerza de los complementos
Para restarle frialdad, Antó añadió elementos de madera por doquier. Desde los adornos hasta los taburetes. Incluso las macetas son marrones, creando un cálido y acogedor contraste.
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18. Una cocina abierta y rústica con el frescor del verano
En esta cocina abierta, la madera de pino es la principal protagonista. Desde el frigorífico panelado a la isla lucen en esta madera. Para que su fuerza no se vea eclipsada, pero sobre todo no resulte cargante, se han prescindido de los armarios altos.
Cocina diseño de Estils i Formes. Taburetes de Lenne Bjerre, en Stand del Mueble.
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Hidráulicos en la pared
Al eliminar la presencia de armarios altos y con el objetivo de darle un toque divertido a la cocina, se colocaron dos hileras de azulejos hidráulicos en la pared del fondo.
Azulejos, de Mira Colour
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19. Muy rectangular y con maxi isla
Abrir una planta alargada es un acierto. Esta cocina se integra en el salón, una isla marca los límites entre cada espacio y además cuenta con taburetes a modo de barra.
Mobiliario de Art Cuines, taburetes en Grup Escrivá Interiors, encimera de Krion y lámparas de techo en Gaudir Iluminación.
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Adaptar el mobiliario
En un extremo de la planta de la cocina se ubica el comedor, totalmente integrado. En esta zona, los muebles adosados a la pared completan la decoración del comedor -a modo de aparador con baldas- y encajan con el diseño de la cocina.
Mobiliario de Art Cuines y taburetes en Grup Escrivá Interiors.
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20. Revestimientos que delimitan
Esta cocina se abre al comedor. El mobiliario, de línea sencilla, mantiene la unidad con el resto de la decoración gracias a los tonos arena utilizados. Sin embargo, el suelo marca su espacio.
Mobiliario de Blum, taburetes en La Maison, mesa del comedor y lámparas de techo de El Corte Inglés.
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Barra baja adosada a la isla
En esta cocina la isla se prolonga en una barra baja de comidas, perfecta para sillas o taburetes. La altura de una barra en línea con la encimera es 92 cm. Más alta, la barra se coloca a 106 cm y una baja, a 75 cm.
Muebles de Blum, taburetes de La Maison y pantallas en Tierra Extraña.
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21. A través del cristal
Un cerramiento interior de cristal es una solución diez para integrar la cocina en el salón-comedor e independizarla cuando necesites.
Mesa y sillas de Andreu World, lámpara de techo de Vibia en Susaeta Iluminación, muebles de cocina de Santos Estudio Bilbao y campana empotrada en el techo de Gutmann.
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Detalles prácticos y estéticos
La encimera se prolonga para crear una barra de desayunos y comidas rápidas, muy práctica para no tener que usar siempre el comedor. ¿Te has fijado en el revestimiento de la pared?
Mobiliario de Santos Estudio Bilbao, taburetes en Ondarreta, lámparas sobre la barra de Dekoark y encimera de Laminam.
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22. Una buena planificación que aprovecha el espacio
El mobiliario de la cocina se dispone en L adosado a la pared y una isla de almacenaje organiza la circulación entre la zona de paso y el comedor. Alrededor de una isla necesitas mínimo 80 cm de distancia hasta el elemento más cercano.
Tirar las paredes de esta cocina hace que toda la habitación parezca más grande. El suelo de estampado geométrico delimita el espacio de trabajo.
Mesa modelo Omnia, sillas de ratán modelo Easy y lámpara de techo de El Corte Inglés.
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23. Para ganar luz natural
Los muebles se distribuyen en forma de U y así la cocina queda delimitada aunque integrada en el comedor y salón al mismo tiempo. La luz natural que entra por la ventana llega a todo el espacio.
Butacas de caña de Valentina Shop, sillas de Bloomingville y lámpara de techo diseño de Carolina Juanes.
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Muebles que delimitan
Uno de los frentes de la cocina divide a modo de península el comedor y la cocina. Además, este se aprovecha para instalar el radiador en un lugar visualmente discreto.
Sillas de Bloomingville, lámpara de techo diseño de Carolina Juanes y alfombra de Ikea.
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24. Muebles acabados en negro brillo
Cuando la cocina se abre al salón hay que cuidar especialmente la elección del mobiliario para que no desentone. El negro es arriesgado, pero el resultado es elegante y actual.
Encimera de Silestone Blanco Zeus, azulejos Gala y lámparas de techo y taburetes metálicos en Maisons du Monde.
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25. La mesa de comedor "metida" en la cocina
Es un recurso que funciona cuando la cocina se abre al salón: colocar la mesa de comedor como elemento de transición entre uno y otro ambiente.
Mesa de Elite Diseño, sillas de Ottoyanna y mobiliario de la cocina y encimera de Maestro Canet.
Esta cocina con barra se abre por completo al salón. Una isla con barra y taburetes delimita los espacios. Un cerramiento con puertas de madera y cristal marca la zona de la despensa. Muebles de Top Cuines, encimera de TST, taburetes de Cristina Carbonell, sillas en Luzio y alfombra en Gra.
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27. Cocina abierta=más amplitud
Integrar la cocina en el salón siempre concede metros. En este caso un muro separa la cocina del recibidor y se aprovecha para adosar un office ligero en una zona de paso.
Muebles de César, campana E-15 de Pando, mesa realizada a medida, taburetes de Varenna y lámparas de techo de Vesoi en Vive Estudio.
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28. Campana empotrada en el techo
Así se consigue que la continuidad visual entre el salón y la cocina sea mayor. El uso de dos acabados en los muebles hace que la isla resulte menos pesada -en blanco- y el frente del fondo -en madera oscura- da profundidad.
Diseño de Vive Estudio.
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Isla con zona de cocción
Un frente acristalado con puerta corredera integra la cocina en el salón, pero permite aislarla para evitar, por ejemplo, el olor y humo mientras se cocina. Otro acierto: adosar una mesa a la isla con placa a modo de office.
Mesa diseño de Vive Estudio y lámpara de techo de Pholc.
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29. Soluciones de obra
Un murete delimita la cocina del comedor pero al mismo tiempo se aprovecha para instalar la grifería de la zona del fregadero en el lado de la cocina y es el respaldo de un banco que completa los asientos en el comedor.
Mobiliario diseñado por Gud.
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Mobiliario abierto y cerrado
Los muebles de la cocina se organizan en forma de L adosados a las paredes y para que la composición resulte ligera se combinan módulos cerrados con puertas y estantes.
Mobiliario diseñado por Gud.
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30. Barra y comedor al mismo tiempo
Una solución de este tipo con la cocina abierta concede metros al salón en el que ya no es necesario colocar un rincón de comedor.
Mobiliario realizado por Carpintería Rimvara, lámparas de techo de Côté Déco, taburetes de Pilma, mesa de centro de Habitat, puf de Zara Home y sofá y alfombra de Ikea.
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Soluciones ingeniosas
Que aprovechan el espacio. La escalera por la que se accede a la segunda planta de esta casa se integra en la cocina perfectamente, aprovechando la zona bajo los escalones con muebles a medida.
Mobiliario de Carpintería Romvara, lámparas de techo de Côté Déco y taburetes de Pilma.
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31. Una cocina abierta en un piso mini
Ganar metros y comodidad para moverse por la cocina con más libertad. Prescindir de paredes cuando los ambientes son pequeños es la mejor solución. Salón, comedor y cocina se suceden.
Mobiliario acabado madera lacada en blanco en MJ Figueroa, sillas de Ikea y baldosas de Álvaro Guadaño.
Para que la continuidad entre el salón y la cocina sea total. Solo un acristalamiento sobre un murete delimita zonas sin entorpecer la vista.
Muebles de Azulejos Gala, encimera de madera de Logos, grifería de Ikea y taburete de Madame Stoltz.
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Electrodomésticos integrados
Están pero no se ven. De esta manera el resultado es más estético. En esta cocina el frente de trabajo se completa con una zona de muebles altos y una mesa tocinera a modo de office improvisado en la pared que queda libre. Muebles de Azulejos Gala, encimera de madera de Logos y taburete de Madame Stoltz.
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33. Entre el salón-comedor y el recibidor
Abrir la cocina la concedió amplitud pero también a la entrada de la casa.
Mesa de Carl Hansen y Sillas de Federica.
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34. Con mini barra de desayunos
La cocina se distribuye en dos frentes paralelos, uno con fregadero y otro con placa de cocción. A este último se adosa una mini barra de desayunos a medida, realizada en madera. Toda la cocina combina madera, blanco y negro.
Muebles en roble lacado realizados a medida y taburetes en Catalina House.
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35. Entre paredes de cristal
La cocina de esta casa se integra en el salón a través de los cristales que delimitan la zona de trabajo y el vano que se abre para crear una zona de barra de desayunos con taburetes.
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Que fluya la luz a través del cristal
Las puertas correderas y todo el acristalamiento que delimita la cocina la integran visualmente en el salón-comedor. Así se consigue que tanto la luz que recibe el salón como la que entra por la ventana de la cocina se reparta por los ambientes.
Muebles de Bulthaup, campana de Gutman y placa de Neff.
Así es como se ve la cocina desde el salón-comedor de esta casa. Las paredes con cristales permiten una visión completa tanto desde dentro de la cocina como desde fuera.
Muebles de Bulthaup, campana de Gutman, zona de fuegos de Neff y lámparas de techo de Santa & Cole.
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36. En blanco y madera
Una mezcla de acabados muy cálida para el mobiliario de cocina, perfecta para las que se integran en el salón. El blanco es el acompañante perfecto de las cocinas de madera.
Mobiliario diseño de Àbag Studio y lámpara de techo de Nordlux.
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37. Solo con muebles bajos
Esta cocina es muy ligera. Las ventanas llenan de luz todo el ambiente y permiten disfrutar de las vistas mientras se cocina.
Mobiliario modelo Line-E de Santos en Estudi Ferran, encimera de Neolith piedra de Piombo, apliques en Maisons du Monde, taburetes de Tierra Extraña y electrodomésticos de Neff.
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38. Una buena campana extractora
Cuando la cocina se abre al salón-comedor merece la pena invertir en una potente y silenciosa campana extractora para evitar humos y olores al cocinar.
Sillas, lámpara de techo, mobiliario de cocina y taburetes en Coton et Bois.
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39. El blanco multiplica la luminosidad
Y además es un color neutro que se adapta bien a cualquier estilo decorativo que tenga el salón. El pilar sirve aquí para organizar la distribución.
Mesa y sillas de Antina.
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Aprovechar las vistas
La isla de la cocina prolonga la encimera a modo de barra volada y se orienta hacia la ventana para disfrutar de las vistas. Cuando planifiques la zona de la barra, tenlo en cuenta.
Diseño de ND Sisseny Interiors con mobiliario Kvik y taburetes de Maisons du Monde.
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40. Complementos decorativos que unifiquen
Al abrir la cocina al salón, aunque el mobiliario de esta sea de líneas rectas y muy funcional, incorpora algún elemento que cree unidad estética como lámparas o taburetes.
Muebles lacados en blanco, taburetes y lámpara de hierro colado de Coton et Bois, encimera de Neolith y alfombra de yute en Gra.
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41. Con puertas correderas y vano de cristal
En esta casa se abrieron dos vanos con puertas correderas que comunican la cocina con el comedor y el salón y la parte superior del tabique se sustituyó por un fijo de cristal que deja que la luz se reparta. Así, en el centro, se apoya una maxi isla de muebles con la zona de cocción y el fregadero.
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Muebles altos en columna
En esta cocina un frente al fondo a modo de despensa y en el que se integran algunos electrodomésticos completa la zona de lavado y cocción, instaladas en la isla.
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42. En busca del contraste
Para poner una nota diferente, la encimera en color negro contrasta con el acabado suave de las paredes y de los frentes de los muebles de la cocina.
Mobiliario realizado por Vicenç Torrent, encimera de microcemento realizada por Jordi Soler, grifería en Peralba y aplique de Lámpara y Luz.
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Unidad en los revestimientos
Tanto en el suelo como en las paredes. Es un recurso que funciona para integrar en la decoración la cocina cuando esta se abre al salón-comedor.
Mesa realizada por Vicenç Torrent, sillas y lámpara de techo en Superstudio.
Salón, comedor y cocina. Juntos pero no revueltos. La cocina comunica directamente con el comedor y a su vez ambos ambientes se abren al salón.
Sofá de Ikea, mesa, sillas, alacena y lámparas en Maisons du Monde.
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44. En blanco y madera
La cocina queda delimitada por el mobiliario y con una zona de desayunos y comidas rápidas. En el centro, un mueble auxiliar a modo de isla concede más superficie de trabajo.
Muebles, encimera, taburetes, isla y lámparas de IKEA.
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45. Sin muebles altos
Más ligera. Todo el mobiliario es de líneas sencillas en color blanco. La decoradora Asun Antó diseñó la cocina con módulos adosados a las paredes, una isla central y una barra alta junto a la pared en el mismo material que la encimera.
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46. La mejor distribución
Que la cocina se abra a la zona de comedor es práctico porque evita paseos demasiado largos a la hora de preparar una comida en casa.
Taburetes y lámpara de techo de Rivièra Maison, en Teklassic. Mesa de El Corte Inglés, sillas de Mis en Demeure y lámpara de hierro realizada por Ferrox.
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Estilo clásico o rústico
Si quieres que el mobiliario de la cocina tenga un aire clásico o rústico, apuesta por frentes con molduras y vitrinas con puertas de cristal. Es solo una decisión estética que no resta funcionalidad.
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47. Con vistas al mar
¿Por qué no disfrutar de las vistas al mar desde la cocina? Tirar las paredes ha integrado por completo la cocina en el salón. El mobiliario mantiene la misma línea estética que el resto de la estancia. Así, nada desentona.
Sofás y mesas de centro de Rivièra Maison, alfombra y lámparas de techo en Cassai Home Fashion y taburetes de Kok Maison.
El revestimiento de listones de madera de la pared da un aire rústico a toda la estancia y unifica la cocina con el salón. En la isla se instalan la placa y el fregadero mientras que la despensa, frigorífico, horno y microondas se integran en el frente lateral.
Mobiliario de Birgit Müller, encimera de piedra de Binissalem y taburetes de Kok Maison.
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48. En una zona de paso
La cocina se ubica en una zona de paso pero gana espacio al tirar la pared que la delimita. De esta manera es posible instalar un frente de almacenaje en el pasillo.
Mesa en Brucs, sillas lacadas de Vergés, lámparas de techo y banco realizado a medida en Pia Capdevilla Interiorismo.
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Mobiliario en forma de U
Es una distribución que facilita el trabajo en la cocina. Ten en cuenta que el espacio central debe tener al menos un metro para trabajar cómodamente y abrir puertas y cajones. Mobiliario de Meine Küchen y campana de Siemens.
Esta cocina se abre al comedor y el mobiliario delimita su espacio. En forma de U, uno de los frentes se convierte en un aparador en la zona de comedor con muebles que abren hacia ese lado. Mobiliario de Ibirrinafa Cocinas y Baños, encimera de Dekton, sillas en Crisol y pavimiento cerámico que imita madera de Porcelanosa Grupo.